lunes, 19 de abril de 2010

cabreado

Mañana me acaba el plazo para presentar el pago de mis impuestos.Si bien conozco perfectamente que debo presentar mi liquidación trimestral el día 20, nunca lo he presentado antes del último día. Creo que es un herencia de mis tiempos de estudiante, que me pasaba la noche anterior al examen sin dormir para buscar ese ansiado 5 " pelao" . Cada vez me prometo que lo presentaré dos o tres día antes para estar tranquilo, pero se ve que es innato en mi esperar al último día. Como no podía ser de otra forma, este trimestre es igual pero con el agravante que son las 18 :52 de día 19, y en vez de empezar a hacer mi declaración me ha dado por escribir en el blog.
La verdad que mañana cuando presente mis papeles en el banco, se retirará inmediatamete una cantidad de dinero de mi cuenta corriente, que por otro lado esta más "tísica " que un camello de circo, con el riesgo de entrar en ese color rojo que últimamente me persigue cada final de mes en mi cuenta corriente.
Lo que hoy me cabrea más de lo normal. Estoy Harto¡¡¡¡. Vivo en una comunidad que cada mes hay una operación anti-corrupción de gente que han sido durante 4 años los gestores de mis impuestos. Leí recientemente que un conocido político reconoció que pagaba cantidades importes en dinero negro ( admitiendo tácitamente un presunto delito Fiscal). No sirve de mucho quejarse, si yo me sublevo y me pongo en rebeldía contra la Hacienda Pública tendría una sanción que posiblemente no podría pagar . Así que me resignaré y no haré lo que me pide el cuerpo que es una rebelión Fiscal. Me conformaré con cabrearme y pagar , esperando que al menos con mi dinero lo dediquen a labores sociales no personales.

2 comentarios:

  1. Esta es la triste realidad. Tus derechos como ciudadanos son estos: Tienes derecho a votar cada cuatro años y a ver fútbol y La Noria en la tele.

    Tus obligaciones: Pagar y callar.

    ResponderEliminar
  2. Mi querido Homero, conformémonos con dormir cada noche con la conciencia tranquila por haber cumplido con las obligaciones tributarias. Mírelo de otra forma, peor sería no tener que pagar IVA, por no haber facturado. De las inspecciones fiscales por las que he pasado, quizás algún día podamos hablar, aunque el aumento de su cabreo sería exponencial.
    Un abrazo, de bon de veres.

    ResponderEliminar