lunes, 18 de enero de 2010

Y se hizo la noche

Parece una de esas noches lluviosas que vas conduciendo por un camino buscando tu destino. En cada cruce te preguntas si a la derecha,izquierda o sigo recto. Siempre dudas, ya que las luces se te han apagado. LLegas al siguiente cruce y los ves claro. Pones intermintente, giras a la derecha.
Sigues tu camino pero a los 50 metros crees que te has equivocado.Vuelves atrás, llegas otra vez al cruce, esta vez llueve tan intenso en tu cabeza que no puedes pensar... Optas por el sentido contrario. Crees que has acertado. Sigues unos metros y de repente te resulta familiar un árbol con una forma que minutos antes te había llamado la atención. Te entra una sensación de inseguridad. He pasado por aquí o no?. Vuelves a dar media vuelta hacia el cruce.Ya estas completamente perdido. Optas por buscar el móvil y que alguien que conozca el camino te guíe. Tienes miedo, la noche se ha puesto fea de verdad y te sientes sólo ante la inmensidad de la vida. Coges el móvil y llamas angustiado. Horror, no hay cobertura, nadie contesta. No sabes que opción elegir. Te quedan dos.Una conservadora , volver por donde has venido hasta el inicio del viaje.No sabes si llegarás no tienes suficiente gasolina. La otra es arriesgar a buscar el camino.
No tienes ni idea que hacer. Quieres despertarte de esta pesadilla. La angustia ya te ha comido por dentro. No pasan coches, no hay luces. Todo es un mundo de sombras en el que te has sumergido.
Tenía dos opciones pero se me ocurre otra. Morirme de frío en el coche hasta que salga el sol y pueda reconocer el camino.

6 comentarios:

  1. No pares, sigues, tras el miedo inicial, te paras, reflexionas, (un segundo) y sigues, lo mejor es no pararte.
    Un saludo

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  2. Veo que sigues perdido como hace algunos meses. La tercera opción, la de morirte de frio es la mejor. A veces es bueno dejar que se acerque la guadaña y te separe la cabeza del cuerpo. A veces es la única forma de que tu cabeza pueda ver desde lejos la escena de tu vida con los dos caminos posibles. Solamente si logras verlos con perspectiva sabras cual tomar. Suelo perderme con frecuencia y como siempre acabo con la opción conservadora, alguien siempre me aconseja: si no quieres arriesgarte, sal del camino, mira tu vida desde fuera, coloca cada elemento en su sitio y aprende a manejarlos. (Vaya chorreo mental que acabo de escribir!)
    Bueno, un abrazo virtual, aunque no te ayudará a encontrar el camino, siempre viene bien.

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  3. Querido Homero:

    No sé si lo que cuentas es real o no, pero por si te sirve de algo, creo q la cuestión no es elegir el camino de la derecha, el de la izquierda o el del centro, o quedarte en el mismo lugar, sino que se trata de respirar y dejar que las cosas fluyan y sucedan. A veces, la angustia de la elección hace que esta se complique sin necesidad. Si te permites la licencia de no pensar durante un tiempo y coger perspectiva, probablemente podrás escoger tu camino con más seguridad. En cualquier caso, nunca se trata de un camino, pues la vida es un sendero que se entrecuza constantemente. Somos el resultado de nuestras continuas elecciones. Suerte!

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  4. Ah! Otra cosita, quizás para encontrar el camino te puede ir bien GM(Google Maps, por supuesto. ;D)

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  5. Se ha hundido el barco, capitán?

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